Ayer fue un día muy activo, ni tiempo de ir al supermercado tuve. Menos mal que soy una exagerada y cuando la semana pasada compré cosas para los cuatro días que Oden estaría en casa, compré cosas para bastante más de cuatro días, por ejemplo compré seis litros de yogurt y ya en casa tenía medio litro.

Bueno, teniendo lo más necesario en casa, no fui al supermercado. La mañana la dediqué a hablar por teléfono. Queremos hacer el cambio de apartamento pronto, no esperar al primero de enero, pero temía que mudándonos antes de la fecha que dice el contrato, si pasara algo no lo cubriera el seguro.

Llamé a la compañía de seguros en la que estoy y luego a la de la vecina que me pidió que llamara yo, ella es de Pakistán y habla sueco pero a veces con dificultad. En las dos compañías dijeron que no había problemas. Fui a compartir la alegría con la vecina.

Cuando salíamos a caminar, pensaba ir hasta el centro a sacar plata del automático ya que más tarde tenía hora para Fritiof en la veterinaria, me llamó la dueña de Carl-Otto, necesitaba comunicarse con una persona que vive en esta zona, pero la llamó varios veces por teléfono y el teléfono o lo tenían apagado o no funcionaba, me pidió que pasara por ese edificio a dejar un mensaje.

Fui para ese lado, no había nadie, llamé a la dueña de Carl-Otto mientras salía del edificio hablando con ella me dió por agarrar otro camino para hacer una caminata corta. Al volver a casa, ya pensando en almorzar algo rápido porque a la una vendría la vecina de los viernes que no pudo venir el sábado al cumpleaños y pidió para venir ayer, me dí cuenta que no había pasado por el automático y no tenía plata para pagar la vacuna de Fritiof. Salí corriendo para el centro.

Comí algo apurada, vino la vecina de los viernes, le dió un regalito a Fritiof que ahora ya sabe que adentro puede haber algo interesante. Fransson vino a sacárselo, quería abrirlo él, tiraban uno para cada lado, al final entre los dos lo abrieron.

Fuimos a la veterinaria pero no por el camino de siempre, por donde sueltan a las ovejas, sino que tuvimos que dar otra vuelta un poco más larga ya que antes de ayer llovió y había mucho barro en el campo.

De vuelta a casa llamé a la empresa que nos alquila, pregunté ahí también si podíamos mudarnos antes, dijeron que cuando esté escrito el contrato que dirá que es a partir del primero de enero, podemos ponernos de acuerdo con la vecina y mudarnos el día que querramos, hurra!!!

Otra vez a hablar con la vecina que estaba en el lavadero, la ayudé mientras le contaba. Volví a casa y vino mi hijo y mi nieta. Bueno, y ahora me voy al supermercado y luego me pongo a empaquetar alguna cosa.

Fransson y Fritiof abriendo un paquete, era para Fritiof pero Fransson lo ayudó, para después quedarse él con el regalito que era una pelota:


Camino a la veterinaria, no aparecen Fransson y Fritiof porque los tenía con la correa cortita: