El jueves estando como estaba con vértigo, fui y volví del control de oídos en taxi, esos que puedo pedir por mis problemas de alergias a perfumes. Esta vez, a la vuelta, me tocó a mí esperar a un taximetrista que no encontraba el lugar. Y yo lo ví pasar, primero pensé que era mi taxi, pero siguió de largo y supuse que no era.

Al ratito me llamó al celular, me dijo que no encontraba la dirección. Le dije donde era, dijo que estaba casi al lado. Pasaron los minutos y del taxi ni la sombra. Al rato me llamó otra vez a decirme donde estaba buscándome sin encontrarme, estaba todavía más lejos!

Le dí más datos, yo estaba en un edificio enfrente a la terminal de ómnibus. Lo ví pasar de nuevo y seguir de largo. Quise llamarlo al celular pero no sabía como se hace para ver la última llamada que se tuvo. Lo ví entrar a la terminal de ómnibus y dar vueltas entre los ómnibus, yo le había dicho como se llama el lugar en que yo estaba, no entiendo como pudo pensar que el edificio estuviera en medio de la terminal.
Crucé la calle y cuando volvía le hice señas, casi me paro adelante para que esta vez no siguiera de largo. Por suerte era un chofer positivista. Riéndose me dijo que ahora había aprendido donde quedan más locales y direcciones.

Bueno, se acerca pascuas y me llegó un paquete del club de hobbies, es para hacer gallos, gallinas y pollitos de pascua. Muy fáciles de hacer, hice un gallo, pensando que puedo sacar el molde y después hacer alguno en fieltro, éstos son en cartón duro y brillante, no tuve más que pegar las distintas partes. Quedó así:

Como siempre la cámara haciendo de las suyas, la flor y la parte del ala que parecen amarillas son verde clarito. Las patas chuecas son chuecas nomás, no puedo echarle la culpa a la cámara.