Cuando hago yoga empiezo con un ratito de relajamiento, después los ejercicios que acostumbro hacer y termino nuevamente con relajamiento, tanto tiempo como dediqué al primer relajamiento más los ejercicios.

A veces me relajo tanto que paso entre dormitar y despertarme, lo que no está nada mal, la profesora me dijo que si podía dormir un rato enseguida de los ejercicios, mucho mejor.

Fransson y Fritiof se duermen a mis pies o entre mis pies, apenas empiezo con los ejercicios de relajación, y siguen durmiendo hasta que apago la música y enrrollo la alfombra, cosa que no les gusta nada, voy enrrollando la alfombra y ellos tratando de acostarse otra vez, al final se van a su cama y siguen durmiendo ahí.

Ayer estaba muy cansada y luego del yoga quedé dormida, cosa que me venía muy bien, pero justo ayer a Fransson le dió por despertarse, venir a olfatear mi cara y así despertarme. De todos modos el yoga da energías y pude mantenerme despierta, aunque no me faltaban las ganas de dormir, hasta la noche.

Como niños chicos, Fransson no puede pasar al lado de un murito sin subirse, y Fritiof por supuesto que también lo intenta al ver a Fransson sobre el murito, pero solo no puede, tengo que subirlo yo, después siguen caminando sobre el murito: